Hoy más que nunca, la economía digital es realmente la economía. Las tecnologías digitales, o las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), están impulsando el comercio, la innovación, el espíritu empresarial. Con ellos, el crecimiento y el bienestar social. Esos beneficios dependen de la transparencia.
La transparencia tiene dimensiones técnicas, económicas y sociales. Desde los estándares abiertos para tecnologías y protocolos centrales, y el acceso a precios competitivos para los usuarios, hasta el respeto por la libertad de expresión, los derechos humanos y la privacidad.
La transparencia faculta a la gente a acceder y realizar más cosas con las tecnologías digitales: iniciar un emprendimiento, crear productos nuevos y procesos comerciales o modificar los existentes, expresar opiniones, acumular capital, realizar investigaciones compartir conocimientos e ideas, perfeccionar habilidades, interactuar con gobiernos y más.
La transparencia perfecciona la innovación digital de varias formas: Estimulando el conocimiento y la efusión de datos que apoyan la innovación, fortaleciendo la Internet como una plataforma en la que los emprendedores pueden crear nuevos negocios y comercializar sus ideas facultando nuevos canales para que las empresas realicen inversiones.
Esto disminuye los obstáculos de entrada y releva recursos para la actividad innovadora. La gente puede compartir, acceder e intercambiar conocimientos y tecnologías de formas que antes no eran posibles. Este hecho beneficia la investigación colaborativa, la asistencia de servicios públicos y los movimientos comerciales.
La introducción de diseño de extremo a extremo de Internet, en particular, le hace adecuado para nuevas aplicaciones, coordinado con un mercado competitivo y la inexistencia de control, significa que pueden emerger nuevos servicios.
La amplificación de las tecnologías digitales, principalmente las TIC avanzadas, como la computación en la nube, el análisis de datos y el software de planificación de recursos empresariales, están asociados con un mayor productividad de la innovación.
La proporción de empresas que se acogen a TIC es entre un 20% a un 70% superior entre los innovadores en relación con otras empresas, según el año, el tipo de TIC y el tipo de innovación contemplada.
Asimismo, trabajos recientes sobre la innovación basados en datos (DDI) muestra que las empresas que utilizan datos tienen más posibilidades de innovar e incrementar su productividad mucho más rápido que los no que no la usan (en un 5-10%). Igualmente, el uso de datos de gobierno abierto entre los ciudadanos puede ampliar la transparencia para rendir cuentas acerca de las actividades del gobierno y así incrementar la confianza de la gente.
En esencia, la transparencia es clave, y los obstáculos a la transparencia pueden oprimir la innovación. No solo por la desaceleración de expansión de las TIC, pero también por la reciprocidad, las prácticas e ideas innovadoras, la colaboración pública y más.
En referencia a la economía, la expansión endeble de conocimientos y tecnologías de las empresas en el rendimiento de la productividad a otras empresas mucho menos innovadoras puede ser uno de los motivos trascendentales de la desaceleración en rendimiento general en los últimos veinte años. De hecho, la expansión de las TIC desarrolladas continúa siendo escasa para las PYME y el sector público tanto en la adopción como en el uso.
Por ejemplo, en el año 2014, el 95% de las empresas tenía una conexión de banda ancha, el 40% de las empresas con 250 o más empleados usaban la informática en la nube, en comparación, los pymes tenían menos de una cuarta parte.
Cerrar esta brecha digital debería ser un elemento importante de los esfuerzos de política no solo en la economía, pero también para promover sociedades más inclusivas.
La transparencia no se ve claramente favorecida cuando falta el acceso a las infraestructuras digitales a precios competitivos. Banda ancha móvil y datos, la promoción de estándares abiertos apropiados para aumentar la competencia y la transparencia, y reducir la incomunicación de proveedores, sistemas de flujo de información sólidos: estos son solo algunos de los objetivos a los que deben ambicionar los responsables de políticas cuando hablamos de impulsar una economía digital consolidada.
Sin transparencia no hay fiabilidad. La transparencia depende de la confianza y la privacidad. La construcción de confianza en línea es esencial para que las personas se conviertan en usuarios seguros a largo plazo. Además, la disponibilidad abierta y la amplia adopción de estándares y protocolos de Internet son esenciales para proporcionar una base sobre la cual se puedan construir productos, servicios y procesos nuevos y perfeccionados.
Para promover transparencia, sus ventajas y sus retos, se ha planteado una descripción de transparencia inclusiva y multifacética, desplegando un cuadro para examinar cómo las actividades y condiciones relevantes que tienen un efecto en la transparencia pueden impulsar la innovación digital, presentando prueba preliminar cuantitativa y cualitativa sobre las ramificaciones sociales de menos o más transparencia.