Cuando adquirimos cualquier tipo de activo fijo para nuestra empresa, debemos tener en cuenta que estamos expuestos a grandes inversiones económicas, con un coste alto. Muchas veces resulta difícil tener liquidez suficiente para afrontar este tipo de operaciones sin ver comprometida la estabilidad de la empresa.
Es por esto que cada vez más compañías se deciden a cambiar las reglas del juego y empiezan a usar estrategias de financiación para grandes y pequeñas empresas. Estas nos permiten disponer de activos de forma continua, pagando en pequeñas cuotas el valor total, siempre atendiendo a unos variables tipos de interés.
En España, uno de los sistemas de financiación que empiezan a ser cada vez más extendidos es el Leasing. Este método se lleva a cabo por empresas arrendadoras que prestan un bien a otra empresa a cambio de una cuota periódica, que puede pagarse mensualmente, anualmente, etc.
¿Para quién está diseñado el leasing?
El Leasing es un método de financiación perfecto para pequeños emprendedores, start ups, pymes y demás compañías que disponen de un bajo capital de inversión desde el principio.
Además de esto, algunas grandes empresas lo utilizan para contratar maquinaria o mobiliario puntual, como pueden ser flotas de coches para sus trabajadores o un equipamiento nuevo que necesita ser actualizado de forma periódica.
Una de las grandes ventajas del Leasing es que no hay una sensación de propiedad de los bienes por parte del empresario, y es un método que favorece la constante renovación del producto. De esta forma, las pequeñas y medianas empresas luchan de forma efectiva contra la obsolescencia de la maquinaria sin arruinarse por el camino.
Actualmente en España están autorizadas para realizar operaciones de Leasing las cajas de ahorro, las cajas rurales y cooperativas de crédito, los principales bancos y los establecimientos financieros de crédito.
¿En qué consiste el leasing financiero y qué ventajas ofrece?
El leasing financiero consiste en la financiación al 100% de un bien con derecho a una compra final. Este método de financiación no hace necesario el pago de una entrada, aunque evidentemente conlleva una serie de comisiones e intereses. Es válido tanto para bienes mobiliarios como maquinaria y pequeños y grandes muebles como para bienes inmobiliarios, como naves, locales y demás instalaciones.
La opción a compra del leasing siempre está incluida, pero el empresario no tiene por qué hacerla efectiva. Esto permite poder renovar la maquinaria en caso de obsolescencia con una nueva operación de renting.
Las ventajas del leasing para contratar maquinaria son las siguientes:
- Hace que las pequeñas empresas y los emprendedores puedan tener un equipamiento de calidad para su compañía, evitando que se tengan que realizar grandes desembolsos ante un bajo capital inicial.
- Con el leasing podemos financiar hasta el 100% del capital que queramos adquirir.
- Podemos mantener la maquinaria y las instalaciones siempre actualizadas sin tener que comprarlas, simplemente tendremos que solicitar una nueva operación de leasing.
- Tendremos generosas deducciones y desgravaciones, lo cual beneficia enormemente a los empresarios de cara a los ejercicios fiscales.