En España siempre han estado, claramente repartidas, algunas de las empresas punteras del país y la del calzado ha ido ligada a lo largo de la historia a la Comunidad Valenciana.
Eso sí, las fabricas de calzado en Elche son de las más destacadas porque de las 13.213 ocupaciones registradas por la Seguridad Social, un total de 10.000 se corresponden en esta región sólo al sector del calzado. Además, cabe matizar que la industria zapatera es de lo más puntera porque consigue reinventarse año tras año para poder competir con los mercados internacionales, sin dejar por ello de ofrecer la misma calidad con la que han contado siempre.
En la actualidad, tanto el sector del calzado como el del cuero, ocupan el tercer puesto en cuanto a nivel de ocupación industrial en Valencia. Y lo hacen justo detrás de la alimentación (donde destacan sus famosas naranjas) y los productos minerales no metálicos.
Para hacernos una idea de hasta qué punto esa comunidad autónoma depende de este sector, tan sólo hace falta echar un vistazo a las cifras. Hablamos de que 30.000 personas en la región, repartidas en 3.000 empresas de fabricación, se dedican a este menester y otro millar se hace cargo de la industria auxiliar con la que va asociada, tal y como se recoge en un estudio llevado a cabo por la Universidad Politécnica de Valencia.
Las fabricas del calzado en Elche se hacen fuertes con las de Petrer, Elda, Villena y Crevillent, pues son los lugares donde este sector está más arraigado, pero no cabe duda de que todo ha cambiado en los últimos años. Hace tan sólo un par de meses que tuvo lugar la feria Momad Shoes en Madrid, todo un escaparate para quienes comercializan con calzado.
Aquí, como los mismos empresarios manifestaron, su objetivo ya no sólo estaba puesto en captar clientes sino en que estos se quedaran con la marca y supieran las diferencias de comprar un producto como los suyos, que es sinónimo de calidad.
Por qué comprar zapatos hechos de Elche
La calidad se paga, es es indudable pero algo con lo que también contamos ahora es con un consumidor de lo más informado, gracias a la facilidad de acceso a la información con la que cuenta. Si nos quedamos sólo con el precio, lo más seguro es que se opte por un zapato que haya que renovar en muy poco tiempo y que puede, incluso, acarrear problemas de salud.
Cuando se opta por una fábrica del calzado de Elche ya sólo por su tradición se puede contar con que saben lo que están haciendo. Ofrecen zapatos para todos (adultos y niños) y antes de lanzarlos al mercado se comprometen a llevar a cabo pruebas de ensayo exhaustivas para asegurar una buena respuesta de los materiales con los que cuentan.
Por supuesto, se puede estar seguros de que cumplirán con todas las normativas vigentes y de que la calidad de sus productos será máxima. Y todo esto por no hablar de que se apoya a empresas nacionales, con lo que se repercute, de manera directa e indirecta, en el mejoramiento de la economía general, lo que es un bien para todos los españoles.