En todos los sectores laborales hay marcas referentes, un objetivo a alcanzar y para el que se forman muchos trabajadores. El currículum vitae es una carta de presentación que, hoy en día, sigue teniendo total validez. Por eso es imprescindible saber cómo prepararlo y, sobre todo, dónde dirigirlo.
Trabajar para una gran marca, conocida internacionalmente, da prestigio y reputación a la persona que ostenta un puesto dentro de la empresa. Esto puede abrirte puertas para próximos empleos y, con ello, puedes ir escalando puestos dentro de la propia compañía.
Enviar el currículum a algunas grandes marcas puede ser complicado. Algunos contactos no son accesibles o visibles fácilmente. Pero ahora podemos contar con una base de datos completa para trabajar con grandes marcas y acceder directamente a sus puestos vacantes y formularios de contacto. Disponer de una guía que nos permite movernos fácilmente por las páginas web de las compañías más importantes nos ahorra tiempo y esfuerzos.
Datos que no pueden faltar en un buen currículum
Nuestro currículum ofrece al empresario una primera impresión de nuestros estudios, cualidades y habilidades. Es fundamental redactar un documento claro, ordenado y estético. La propia presentación del currículum dice mucho de nosotros: si somos creativos, precisos, perfeccionistas… Más allá de la información básica, hay ciertos aspectos que no podemos dejar pasar si queremos tener un currículum profesional capaz de convencer.
- Sé conciso y práctico: Un buen currículum no debería ocupar más de un folio, dos a lo sumo. El empleador quiere hacerse una idea general de tu experiencia, para obtener más detalles del candidato se utiliza la entrevista personal. Si eres claro pero breve tendrás más posibilidades de que la otra persona lea el documento.
- El diseño cuenta: En la sociedad actual la imagen juega un papel importante. Aprovecha la oportunidad de demostrar que eres una persona creativa e innovadora con un diseño original y diferenciador.
- La honestidad es un punto a tu favor: No exageres tu formación ni tu experiencia y menos aún mientas sobre tus conocimientos. Embellecer la manera en la que te presentas no está mal visto pero sí inflar tu curriculum desmesuradamente. No pongas en riesgo tu reputación.
- Añade una amplia información de contacto: Además de tu teléfono y dirección de correo electrónico añade otras formas de dar contigo más actuales como tu LinkedIn, tu dirección de Skype o alguna otra red social que consideres que muestra tu lado más profesional.