El objetivo de toda pyme, más allá de sobrevivir en sus primeros años, es alcanzar un cierto grado de productividad, máxime en estos tiempos donde todos los procesos adquieren un alto grado de digitalización, lo que aplica a todas las áreas de cualquier pequeña y mediana empresa. La tecnología, como el uso de programas erp sage 200, siempre es un valioso compañero de progreso, especialmente en lo referentes a las áreas de tecnología, recursos humanos, documentación, operaciones (útil en negocios online) y en todos aquellos profesionales que gestionan datos y documentos.
Una parte de toda inversión de una pyme debe enfocarse a la búsqueda de los aliados tecnológicos. Por ejemplo, entre otros programas, a la gestión de un software como un ERP (Enterprise Resource Planning, por sus siglas en inglés), cuya programación ayuda a la gestión de todo tipo de procesos de una empresa, enfocados a todos los trabajadores, aunque, dependiendo de las estructuras de cada compañía, suele estar dirigidos por personas con determinados cargos de responsabilidad.
El uso de este programa, así como de otro software que existen en el mercado, proporcionan una mejor optimización de todos los procesos y de la gestión documental, posibilitando que las empresas sean más productivas, avanzando respecto a la competencia. En otras palabras: pasamos de una gestión manual a una gestión informatizada. Es decir, una empresa con un negocio online debe contar con este tipo de programas, de lo contrario, cualquier gestión de compras, ventas, devoluciones, entregas, proveedores o facturas será un proceso altamente complicado.
Ventajas de utilizar un ERP
De no ajustarse a las nuevas opciones que ofrece la digitalización, los errores serán más factibles. Así como la problemática de trabajo en equipo entre varias áreas de la empresa. Es más, en algunos programas, como el mencionado en el primer párrafo, esa colaboración se extiende incluso a empresas externas, colaboradores, proveedores o bancos. La eficacia en la gestión es incuestionable. Estamos refiriéndonos a programas disponibles online, con accesos controlados en función de los permisos que deban otorgarse, con protección y copia de los datos y documentación en gestión y con una empresa externa que se encarga de un mantenimiento y actualización de nuevas versiones.
Además de los beneficios ya comentados, la implementación de un ERP posibilita un buen número de ventajas a toda empresa. Apunten algunos de ellos: mayor visibilidad de todos los procesos más allá del sector en el que se opere; una mejor planificación de las tareas a gestionar; un aumento de la automatización de diferentes tareas; mejor posicionamiento frente a la competencia (obviamente hay ERP con distintas funcionalidades); una considerable reducción de costes económicos y de tiempo empleado por los profesionales; una mayor agilidad de respuesta ante cualquier problema que pueda surgir y cambio del mercado.
En resumen, el uso de este tipo de herramientas facilita, por último, una mejor toma de decisiones clave en el desarrollo de todo plan estratégico de toda pyme. Si aún no cuenta, su pyme, con un programa de esta configuración, deberá actualizar su estructura, pero evaluando las diferentes necesidades de cada ERP. Es decir, hay que saber adaptar este tipo de programas a las funciones de cada pequeña o mediana empresa. Las soluciones siempre son personalizables, otra ventaja.